Si tienes un móvil Android y quieres explorar todo lo que realmente puedes hacer con él, vamos a ver cómo rootear Android. Repasaremos qué es hacer root de un móvil, en qué casos es conveniente hacerlo, y cuáles son los principales riesgos de rootear un teléfono.
¿Qué es rootear y para qué se usa?
El concepto ‘rootear’ viene del término anglosajón ‘root’, que significa ‘raíz’. Se llama así porque hace referencia a obtener acceso a la ‘raíz’ de un sistema operativo. Rootear un Android equivale a hacer jailbreak en un iPhone, así que, al hacer root a un teléfono, podremos modificar todo tipo de funciones de su sistema. ¿Qué es rootear un móvil, entonces? Simplemente, es desbloquear sus barreras digitales para obtener pleno control de su software.
Ventajas y desventajas de hacer root en teléfonos Android
Rootear un Android es una gran manera de conseguir acceso a muchas más funciones en tu dispositivo, pero, al mismo tiempo, entraña algunos riesgos que deberías considerar. Estos son los principales pros y contras de rootear un Android:
Ventajas de rootear un Android
Hacer root a un teléfono Android te da pleno control sobre tu dispositivo, así que podrás disfrutar de muchas ventajas que de otro modo no estarían a tu alcance. Estas son algunas de las principales razones por las que puede ser buena idea hacer root en tu móvil:
- Personalizar y controlar tu teléfono. Al rootear tu Android tendrás la posibilidad de acceder a una amplísima variedad de funciones de personalización del sistema operativo que, de otro modo, estarían fuera de tu alcance. Si realmente quieres que tu teléfono se sienta ‘tuyo’, el rooteo puede ser una excelente opción para ti.
- Liberar espacio. Los teléfonos móviles acostumbran a tener múltiples aplicaciones preinstaladas que no necesitamos y que no podemos desinstalar sin hacer root. Se trata del bloatware, un problema que puede resolverse fácilmente mediante el rooteo del dispositivo si quieres liberar espacio para almacenar fotos o instalar otras apps.
- Instalar cualquier app. Hablando de instalar apps, hay múltiples aplicaciones que no pueden instalarse en el móvil si no haces root primero en el sistema operativo, y muchas otras que no tendrán todas sus funciones disponibles. Tras hacer root, podrás instalar cualquier app y aprovechar al máximo todas sus funciones.
- Cambiar el sistema operativo. Al hacer root en el teléfono se pueden hacer todo tipo de modificaciones en el sistema operativo, incluyendo la posibilidad de instalar otras versiones de Android alternativas. Estas versiones de Android pueden incorporar mejoras con respecto a las versiones originales, por ejemplo eliminando el bloatware.
- Respaldar tus datos. Si quieres hacer una copia de respaldo extensiva de tu móvil –capaz de abarcar la totalidad de tus datos y el sistema operativo en su conjunto–, en la mayoría de los casos necesitarás rootear el móvil para que la app de backup tenga acceso a todos los datos. De esta manera podrás clonar tu móvil en otro dispositivo.
Desventajas de hacer root a un Android
Rootear un móvil no deja de ser una modificación muy seria del sistema operativo, lo que entraña riesgos evidentes. Estos riesgos pueden ir desde la anulación de la garantía del fabricante hasta sufrir daños irreversibles en el dispositivo.
- Puedes dañar tu Android. El principal riesgo que deberías tener en cuenta al rootear un Android es que el firmware puede dañarse. Si esto ocurre, tu dispositivo puede quedar inutilizado de manera reversible –un ‘soft brick’– o irreversible –un ‘hard brick’–. Por esto debes considerar muy bien si te merece la pena el riesgo del rooteo.
- La garantía de tu Android ya no será válida. Lo que ocurrirá con absoluta certeza si rooteas tu móvil es que su garantía dejará de ser válida, porque habrás realizado modificaciones que la anulan. Si tu móvil se encuentra todavía en periodo de garantía y quieres contar con esa protección del fabricante, es mejor no hacer el root.
- Tu Android puede ser más vulnerable. Los Android rooteados pueden quedar más expuestos al malware y los hackeos del móvil. Al rootear el dispositivo alteras el sistema operativo, y estos cambios pueden presentar vulnerabilidades no parcheables. Además, las actualizaciones OTA suelen dejar de estar disponibles.
- Algunas apps de rooteo son maliciosas. En algunos casos estarás instalando software malicioso en tu dispositivo de forma directa cuando hagas uso de una app de rooteo. Como veremos algo más adelante, las apps para hacer root de Android no siempre son confiables, así que deberías analizarlas bien antes de usarlas.
- No podrás usar algunas apps. En ciertos casos, el rooteo del sistema operativo hace que algunas aplicaciones dejen de estar disponibles. Esto suele ocurrir con las billeteras electrónicas o las apps de banca online, que, para garantizar la seguridad de tus fondos, se deshabilitan de forma automática si haces root en el sistema.
Qué hay que saber antes de rootear un móvil Android
Ahora ya conoces algunos de los principales riesgos que entraña rootear un Android. Una buena manera de mitigar estos riesgos pasa por adoptar algunas precauciones antes de proceder al rooteo. Si proteges tus datos de forma adecuada, puedes intentar hacer root en tu dispositivo con relativa seguridad.
- Verifica que tu método de rooteo sea legítimo. Si eliges una app de terceros para rootear tu Android –o si optas por instalar una versión de Android ya rooteada–, deberías comprobar que se trate de software legítimo y libre de malware. Revisa las reseñas de otros usuarios y analiza bien tus opciones antes de elegir.
- Haz una copia de respaldo de tus datos. Incluso con un método legítimo, el riesgo de perder tus datos privados está presente. Hay muchas cosas que pueden salir mal durante el rooteo de un Android, así que asegúrate de respaldar tus datos adecuadamente antes de iniciar el proceso.
- Ten claro el uso que quieres darle a tu dispositivo. Un teléfono rooteado puede no ser la mejor herramienta para gestionar tus apps de banca online o acceder a tus redes sociales profesionales. Elige un móvil sin rootear para estos usos, y solo haz root en un dispositivo con el que vayas a gestionar datos relativamente inocuos.
- Programa un calendario de actualizaciones manuales. Las actualizaciones OTA seguramente no funcionarán de forma adecuada en tu dispositivo rooteado, o desharán el root al restablecer el firmware. Programa un calendario de actualizaciones manuales para asegurarte de que tu dispositivo se mantenga libre de vulnerabilidades.
Cómo hacer root a tu dispositivo Android
Hay múltiples formas de rootear un dispositivo, sobre todo si cuentas con suficiente experiencia técnica. A grandes rasgos, sin embargo, las maneras más habituales de rootear un Android se reducen a tres:
- Apps para rootear Android. La manera más rápida de rootear un Android suele ser mediante una app de terceros. Hay múltiples aplicaciones de rooteo en circulación con las que se puede hacer root del dispositivo con solo un clic. Sin embargo, resulta difícil verificar la confiabilidad de la mayoría de estas apps.
- Instalar ROMs rooteadas. Existen versiones modificadas de Android que pueden instalarse desde cero y que ya incorporan el root de fábrica. Este método es relativamente más seguro que usar una app de rooteo de terceros, pero implica la reinstalación completa del sistema operativo.
- Aplicaciones del fabricante. Algunos fabricantes de móviles ofrecen aplicaciones nativas para flashear el firmware y hacer root en sus dispositivos. Quizá el más popular sea Odin, de Samsung. Estos métodos son más seguros que las aplicaciones de terceros, aunque tienen limitaciones y no todos los fabricantes los ofrecen.
¿Es seguro hacer root a tu dispositivo Android?
Queda claro entonces que el rooteo es un proceso que implica serias modificaciones en tu dispositivo, así que ¿es seguro rootear un móvil? Lamentablemente, hacer root de un teléfono no es un proceso 100% seguro, porque implica toda una serie de alteraciones en tu sistema con las que siempre existe el riesgo de dañar el dispositivo, incluso de forma irreversible.
Además, a estos riesgos del proceso hay que añadir la posibilidad de que tu dispositivo quede expuesto al malware, o, peor aún, que la app para rootear el móvil sea maliciosa. La dificultad para actualizar el sistema operativo después de rootearlo es un problema añadido que mucha gente pasa por alto, y, si tu dispositivo queda dañado, no podrás hacer uso de la garantía del fabricante. Por eso deberías plantearte muy bien si quieres hacer root de tu teléfono o no.
