Pasos que debes seguir si tu Wi-Fi es hackeada
Quizá te has encontrado preguntándote en alguna ocasión: ¿Cómo saber si me roban mi WiFi? ¿Es mi WiFi una conexión segura? Tal vez alguien haya hackeado tu conexión y esté utilizándola para conectar sus dispositivos, o peor aún, ¡quizá esté accediendo a tus datos personales! A continuación veremos los pasos fundamentales que debes tomar en caso de que tu Wi-Fi esté siendo explotada por terceros.
Prevención
El primer paso debería tomarse siempre antes de un posible hackeo, y no es otro que la prevención. El uso de routers demasiado comunes, la encriptación débil (o la no encriptación) y las contraseñas sencillas son errores que hay que evitar desde el primer momento. Asegúrate entonces de tomar medidas como proteger tu conexión Wi-Fi, usar contraseñas robustas y encriptar tu conexión. ¡La mejor solución frente a un hackeo es, simplemente, que no ocurra nunca!
Desconectar tus dispositivos
Pero ¿qué hacer si el hackeo ya se ha producido? Lo primero que debes hacer si sospechas que tu red Wi-Fi está comprometida es desconectar todos tus dispositivos y apagar el router. Si alguien tiene acceso a tu Wi-Fi puede tener acceso a todos los datos almacenados en tu PC, tu teléfono o incluso tu televisor. Es MUY importante cortar ese acceso desde el primer momento.
Desinfectar tus dispositivos
Con la red desconectada y tus dispositivos a salvo, es un buen momento para pasar el antivirus en tu teléfono y tu PC y eliminar cualquier malware que los haya podido infectar. Si tu PC tiene un trojan activo, volverá a explotar las vulnerabilidades de tu red en cuanto lo reconectes y tus datos quedarán expuestos nuevamente. Es necesario atajar ese riesgo cuanto antes.
Restablecer la configuración de fábrica del router
Ahora que tus dispositivos están desinfectados podemos resetear el router para restablecer su configuración de fábrica. Esto eliminará cualquier modificación externa que haya podido realizarse en los accesos a tu router y cerrará las puertas que el hacker se haya dejado abiertas. ¡Pero cuidado! Restablecer el router no es lo mismo que simplemente reiniciarlo. Necesitarás seguir atentamente los pasos que te indique en el manual para volver a dejarlo como recién salido de la caja.
Cambiar la configuración de fábrica del router
Espera, ¿qué? ¿No has dicho hace un momento que restablezca la configuración de fábrica del router? Así es. Primero es necesario restablecer su configuración de fábrica para eliminar posibles accesos abiertos, pero ahora es el momento de impedir que el hackeo anterior vuelva a ocurrir. Muchos routers vienen con un usuario y contraseña por defecto que son terriblemente comunes: admin, 1234, password… Se trata de términos estándar que están pensados para ser utilizados solamente en el primer acceso, y que después deberían ser cambiados para prevenir que un hacker acceda a la configuración del router con la misma facilidad. Ahora es el momento de darle a nuestro router un nombre de usuario y una contraseña que tengan una seguridad mucho mayor.
Reforzar la encriptación
¿Ya tenemos nuevo usuario y contraseña? ¡Excelente! ¿Qué tal si ahora nos aseguramos de que la encriptación de nuestra red está blindada? Muchos routers ofrecen diferentes opciones a la hora de encriptar nuestra información. Si puedes elegir entre WPA y WPA2, ni lo pienses: WPA2 es muchísimo más segura.
Reforzar la contraseña
Sin embargo, una encriptación robusta no sirve de nada si la contraseña de acceso es el nombre de nuestro perro, nuestro año de nacimiento o, simplemente, ‘contraseña’. En muchas ocasiones los hackers consiguen acceder a las redes utilizando técnicas psicológicas, no informáticas, para averiguar una contraseña. La mejor manera de prevenir esto es pensar en una contraseña imposible de adivinar. Para mayor seguridad puedes elegir una completamente al azar con un generador de contraseñas.
Renovar la IP
Ahora ya tenemos todos nuestros dispositivos limpios y un router libre de hackers, con todos sus accesos asegurados y con una encriptación y contraseñas robustas. Ya estás listo para navegar, pero, si quieres, puedes dar un paso más y renovar tu IP. Recuerda: la IP es, literalmente, la dirección de tus dispositivos, es decir, es lo que permite que tus dispositivos sean localizables y se comuniquen con otros. El hackeo anterior dejó tus datos expuestos y el hacker logró acceder a tu IP, así que ahora quizá intente hackearla de nuevo. Una buena forma de disuadirlo es que no sepa cuál es, y esto puedes conseguirlo renovándola.
Actualizar tu antivirus
O conseguirte uno más eficiente. Quizá ese AVG Free que tienes instalado no es la mejor opción para mantener tu equipo protegido. Si quieres tener un mayor nivel de seguridad, deberías apostar por un antivirus que sea más robusto.
Utilizar un VPN
Para estar más seguro en lo sucesivo, ¿qué tal si utilizas una VPN para conectarte a la red? De esta forma toda tu navegación se realizará desde un servidor externo que mantendrá en todo momento una conexión encriptada con tu dispositivo. Esto multiplica la seguridad de tu conexión y se lo pondrá doblemente difícil a cualquier hacker que esté tratando de tener acceso a tus datos.
¿Qué es una VPN? Se trata de una herramienta de ciberseguridad que, por una parte, encripta tu conexión de manera avanzada, y, por otra, la redirige a través de sus propios servidores. De esta forma puedes navegar sin que nadie conozca cuál es tu IP, y además, en caso de que alguien intercepte tu conexión, tus datos se mantendrán privados gracias a su encriptación robusta, con lo que nadie podrá leer datos como tus tarjetas de crédito o contraseñas.
En conclusión
Frente a un posible hackeo de nuestras redes, lo primordial ante todo es la prevención. Un router genérico, una contraseña sencilla y una encriptación pobre allanan muchísimo el camino a los hackers, así que es muy importante cuidar todos estos aspectos para mantener seguro nuestro Wi-Fi. Si se produce el hackeo, es fundamental desconectar todos los dispositivos, apagar el router cuanto antes y borrar todos los trazos del hacker pasando un antivirus y restableciendo la configuración de fábrica del router. Entonces, con los dispositivos y la red ya limpios, es el momento de aprender de los errores y reforzar la seguridad al máximo: cambiar los usuarios y contraseñas, activar el mayor nivel de encriptación del router y actualizar los antivirus. Como ayuda extra, no estaría mal comenzar a utilizar una VPN para proteger aún más tu conexión. Y, ahora sí, ya estarás completamente listo para volver a navegar con total seguridad.
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